Los nuevos modelos de ocio están indefiniblemente unidos al entorno digital online. La accesibilidad a internet se ha expandido a lo largo y ancho del globo y los terminales informáticos democratizan sus precios. Así mismo, la oferta lúdica crece y se expande a un ritmo vertiginoso, tanto en forma de videojuegos online para jóvenes como adoptando la forma de plataformas de juegos de apuestas y azar, como el casino de Betfair online dirigidos a un público adulto.
Esta fórmula de diversión, si se realiza en tiempo y forma, sin abusos ni excesos, es capaz de producir beneficios en la salud de los jugadores. En algunos casos, se ha llevado al extremo de servir de herramienta clave para tratar cierto tipo de enfermedades e incluso para recuperar la salud mental.
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Como terapia para el dolor
Los juegos online que requieren atención, que consiguen distraer llevando al usuario a un nivel de concentración superior, consiguen distraer la atención del dolor. En espacios de atención hospitalaria y rehabilitación física, las partidas a la ruleta online y otros juegos que entretienen y divierten vienen empleándose, de forma habitual, como parte de las terapias analgésicas utilizadas.
El juego como terapia para combatir el dolor compite con los fármacos tradicionales gracias a la capacidad de abstracción que poseen, logrando reducir la percepción de dolores agudos en pacientes crónicos e incluso atenuando el efecto de lesiones.
Mejor visión periférica
Otro de los beneficios saludables que resultan de participar de juegos online es la mejora de la visión periférica, así como de la memoria visual, atribuyendo una mejora sustancial en la motilidad ocular y en la agudeza a la vista. Los juegos en estos entornos consiguen elevar la coordinación entre la respuesta manual, la orientación personal y la coordinación ocular.
Se ha demostrado que jugando de forma habitual a juegos online se optimiza la capacidad del ojo para diferenciar los cambios de brillo en las imágenes, por muy sutiles que estos sean, fortaleciendo con ello la sensibilidad al contraste.
En definitiva, la agudeza y la concentración a las que obligan los juegos terminan por llevar al límite el sistema visual. Esto hace que el cerebro se esfuerce y ofrezca una rápida respuesta, una mayor adaptación y se ejercite, en consecuencia. Como conclusión, se puede afirmar que se mejora la visión y se abre la posibilidad de recuperar algunas habilidades que se pierden con la edad.
Hace trabajar la mente
El ejercicio mental que se lleva a cabo con cada juego online repercute beneficiosamente en varios sentidos, los más destacados son la capacidad de aprendizaje, la mejora de la memoria y el procesamiento de la información. Así mismo, se modifica en una dirección positiva el comportamiento de las personas, capacitándolas para la resolución de problemas más rápidamente, y fomentando la pérdida del temor por enfrentarse a nuevos retos.
Por otro lado, se estimulan activamente las funciones del cerebro encargadas de la inteligencia espacial, el razonamiento y la percepción sensorial, elementos que se ven fortalecidos y, por tanto, se mejora su rendimiento.
Por último, reseñar que ha quedado suficientemente demostrado que jugar de este modo retrasa el envejecimiento mental, disminuye el estrés y proporciona felicidad.
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